Mi casa (poema)

rojo

 

 

Sin silencio mi casa no existe.

Habitada por un verde corazón

de clorofila,

las piernas de un reloj le taconean

las paredes del salón

con un paso bipolar

y monótono, si cabe.

De alma elástica y versátil,

cambia de careta, de piel

y de entusiasmos

siguiéndonos la broma

jugando a ser distinta,

creciendo con nosotros,

desbordando

el traje mal cosido

de piso proletario

para el que fue pensada

y construida.

Mi casa es un silencio

cargado de nosotros

y amo sus muros,

centímetro a centímetro,

como amo la piel

del que envejece a mi lado

desencantado, vivo,

canoso y paralelo.

 

 

 

Un comentario Agrega el tuyo

  1. Fer dice:

    “desbordando

    el traje mal cosido

    de piso proletario

    para el que fue pensada

    y construida.”

    Hay magia en esa estrofa y hay una concatenación final de adjetivos que daría para otro poema y que, de hecho, es ya otro poema en sí misma.
    Desencantado, vivo, canoso y paralelo. Un alejandrino que bien podría ser el comienzo de unas memorias. Muy inspirado e inspirador.

    Le gusta a 1 persona

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s